Hace unos días soñé con que iba a ser tu cumpleaños, lo cual se correspondía perfectamente con la realidad, en mi sueño no sabía qué hacer, si intentar llamarte o no, si pasar directamente por tu casa, esperar que respondas un mensaje. ¿Hablo con Paula? ¿Juan sabrá de vos?
Inútil.
Me desperté tan triste. Mi sueño era lo más parecido a la realidad que podía haber. No había nada que interpretar. Tampoco había nada que hacer. Nunca ibas a contestar.
Igual te mandé un mensaje, en efecto, sin respuesta. No importa. Yo te voy a querer siempre, aunque vos no quieras.
Feliz cumpleaños.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario