domingo, 29 de julio de 2012

Todo por 12 pe.

Me compraba alguna ropa y no sé qué pasaba que no podía pagar, que si tarjeta o efectivo, quilombo de papeles en el mostrador... él viene de atrás y paga por mí, son 12 pesos (¡a jugarle!). Que no, gracias, que si, que no... bueno, ahora me ordeno y te devuelvo. ¿Qué hacés ahora? ¿estás ocupada? Pregunta el enemigo...

Eeuh.. es mi oportunidad no-sé-de-qué, aceptar es una traición, no hacerlo no es divertido, sólo quiero saber quién es en realidad, a ver si te sigo odiando o no... que sí, pero bueno, a ver si es con o sin motivos.

"No, nada"

Me invita a tomar un helado.

Yo, como cada vez que me saluda en la real realidad, no estoy segura de que sepa quién soy... ¿es un gil o un perverso?

Veremos si la salida sigue en la próxima siesta porque sonó el despertador para ir a pedalear y ya voy llegando tarde...

No hay comentarios:

Publicar un comentario